La Miniatura

Buenas tardes, hoy víspera de la fiesta del trabajo os enseño esta marca que para mí es una de mis preferidas.

Una de las cosas que a mi particularmente más me gusta de esta marca es la su filosofía de su diseñador  Jeffrey Sebelia y por lo tanto de la marca. Sugiere que los padres, en  demasiadas ocasiones pensamos simplemente en la funcionalidad de la ropa y en que sea fácil para los padres conseguirla, sin tener que buscar mucho mas. Para el la idea de que “mi hijo va a estar todo el tiempo sucio o que se va a manchar” o que”si total, en seguida crecen” o que simplemente “no tengo tiempo de…” no le valen…y creo que es ¡genial! ¡Me encanta! .Dice en una entrevista que trascribo aquí sacada del blog CoolKidsNYC que “nos lleva más tiempo coger nuestro Iphone, que  decidir lo que nuestro hijo va a llevar al cole…..”

Y en cierto modo tiene razón, todo esto es para destacar que la ropa que presenta esta marca está abanderada bajo el lema de “vestir a tus hijos con dignidad”, así que no en vano esta marca no es la que normalmente se podría decir que es “ropa de niños para niños” aunque evidentemente para el sí.

Esta marca busca, por supuesto, la confortabilidad de uso para los niños pero que lo que los niños lleven sea “cool” and “on fashion”.

Es fresca y elegante y mezcla grunge, punk y rock inspirada en los últimos años de la década de los 70 y principios de los 80 .Un post-punk re-interpretada a través de la lente de las tendencias actuales y detalles clásicos para los niños.

Para esta primavera-verano 2013 propone una mezcla que va, desde lo más formal con trajes de chaqueta súper elegante y formal con polos y camisas hasta un look más casual con pantalones descoloridos de colores primarios (amarillos, rojos, verdes y naranjas) con camisetas y pantalones sueltos de algodón.

Si queréis mas información acerca de la marca os podéis poner en contacto con su distribuidor para Europa bib@zinckids.com o visitar su web http://www.laminiaturakids.com

Lo que está claro es que esta marca no deja a nadie indiferente. ¿Verdad? ¿Os gusta?

¿Qué pensáis? ¿Estamos realmente tan obsesionados-as con que nuestros niños “no se manchen”?